A medida que nuestras queridas mascotas envejecen, sus organismos pasan por cambios. Por eso, es esencial comprender cuando ellos entran en la fase anciana, que requiere una atención especial para garantizar su salud y bienestar.
El inicio de la fase “anciana” de los perros depende de la raza y del tamaño. Generalmente, perros pequeños son considerados ancianos a partir de los 7 años de edad, mientras perros de razas mayores pueden ser considerados ancianos por vuelta de los 5 años de edad. Sin embargo, puede variar de acuerdo con la salud y estilo de vida de cada mascota. Algunos perros, más saludables y activos, pueden ser considerados ancianos más tarde en la vida, mientras otros que tienen problemas de salud o estilos de vida sedentarios pueden ser considerados ancianos más temprano.
Para los gatos, las señales de envejecimiento pueden cambiar dependiendo de la raza y del estilo del animal. Gatos de razas más grandes, como Maine Coon, pueden presentar señales de envejecimiento por vuelta de los 6 años de edad, mientras gatos de razas más pequeñas presentan señales por vuelta de los 10 años de edad. Nuevamente, eso puede cambiar dependiendo de la salud y estilo de vida de cada gato.
A la vez que nuestros perros y gatos envejecen, ellos pueden enfrentar una serie de desafíos en la salud. Entre las señales más comunes, están la pérdida de masa muscular (nombrada sarcopenia), acumulo de sarro en los dientes, problemas en las encías y alteraciones en la visión, audición y cognición. Además de eso, problemas en las articulaciones y dificultades de movimiento pueden aparecer, haciendo las actividades cotidianas más desafiantes.
Es importante estar consciente de que animales ancianos tienen mayor susceptibilidad a ciertas condiciones médicas, como diabetes, enfermedades cardíacas y problemas en los riñones. Así, la vigilancia constante de la salud de su compañero peludo es fundamental. Realizar pruebas de rutina con un veterinario es la manera más eficiente de identificar precozmente cualquier problema de salud y tomar medidas para garantizar una calidad de vida prolongada y cómoda para tu mascota anciana.
Además de eso, los perros y gatos en esta fase de la vida pueden necesitar de cuidados especiales en términos nutricionales y de actividad física. Ellos necesitan de dietas especiales y de un nível diferente de actividad física, dependiendo de la condición física, para prevenir enfermedades asociadas al envejecimiento y aumentar la calidad de vida. Por eso, es recomendable cambiar la dieta de tu mascota a medida que envejece, para un alimento con indicaciones para su franja etaria. Por lo tanto es importante monitorear la salud de tu mascota anciana y ofrecer los cuidados adecuados, incluyendo nutrición, ejercicios adecuados y pruebas médicas regulares, para garantizar que tenga una vida sana y feliz.