El tracto urinario es el conjunto de órganos encargados de producir, almacenar y
excretar la orina. Se divide en superior (riñones y uréteres) e inferior (vejiga urinaria
y uretra). Este sistema puede verse afectado por diversas enfermedades, como la
infección urinaria y la formación de cálculos en varios puntos. Dependiendo de su
ubicación y tamaño, estos cálculos pueden obstruir el paso de la orina, sobre todo
en los gatos machos.
Los perros y gatos con alteraciones en las vías urinarias pueden mostrar signos
como: dificultad o dolor al orinar, presencia de sangre en la orina, micción en un
lugar inadecuado e incontinencia urinaria. La causa de estas manifestaciones puede
estar relacionada con el estilo de vida, la escasa ingesta de agua y la dieta.
La formación de cálculos (también conocidos como «urolitos»), así como su
tratamiento, tienen mucho que ver con el tipo de alimentación que se ofrece a su
mascota. Para evitar la formación de cálculos, es posible utilizar dietas que
favorezcan la salud del tracto urinario, por ejemplo, las que controlan el pH
(«acidez») de la orina para dificultar la formación de cálculos, y las que favorecen la
ingesta de agua.

Cuando ya hay cálculos, el tratamiento nutricional varía en función de su
composición, que debe ser estimada por el veterinario según la historia clínica y los
exámenes. Hay cálculos que pueden disolverse con la dieta, como los de estruvita.
En este caso, se utilizan alimentos coadyuvantes que modifican el pH de la orina,
permitiendo su disolución. Esto es positivo, ya que evita que el animal tenga que
someterse a una intervención quirúrgica para eliminar los cálculos.
Sin embargo, no todos los cálculos pueden disolverse, es el caso, por ejemplo, de
los urolitos de oxalato de calcio. En este caso, además de la extirpación quirúrgica
(cuando se recomienda), se recurre a la gestión nutricional para prevenir la
formación de nuevos cálculos priorizando la ingesta de agua y controlando el pH y la
composición de la orina.
Así pues, en lo que respecta a la nutrición del tracto urinario de perros y gatos,
recuerde:
- Anime a su mascota a beber agua. Un bajo consumo de agua influye mucho en
la concentración de orina y, en consecuencia, en la acumulación de sedimentos que,
en el futuro, se convierten en los temidos cálculos urinarios. - Utilice dietas específicas cuando su mascota tenga cálculos disolubles.
Algunos cálculos pueden disolverse utilizando dietas que alteran el pH de la orina y
reducen las sustancias que contribuyen a la formación de urolitos. - Ofrezca alimentos húmedos, como las famosas «bolsitas» que fomentan una
mayor ingesta de agua y ayudan a diluir la orina, reduciendo la concentración de
minerales y otras sustancias que pueden formar cálculos urinarios.
Por último, el tracto urinario es un sistema que debe vigilarse de cerca, no sólo para
diagnosticar posibles alteraciones, sino también para el tratamiento individual de
cada animal. Por lo tanto, si tiene un animal con alguna de las manifestaciones
mencionadas o incluso diagnosticado de alteraciones tanto en el tracto superior
como en el inferior, acuda a un nutricionista veterinario para que le ayude a
encontrar la mejor dieta para su mascota.