En los últimos años, la nutrición animal ha evolucionado notablemente, y la inclusión
de harinas vegetales en la dieta de perros y gatos se ha convertido en una práctica
cada vez más habitual. No sólo aportan nutrientes esenciales, sino que también
presentan una serie de ventajas y contribuyen a la sostenibilidad del producto final.
Las principales harinas vegetales utilizadas para formular dietas para perros y gatos
son harina de arroz, harina de trigo, harina de soja y harina de maíz. Estos
ingredientes son subproductos ricos en fibra, carbohidratos, vitaminas y minerales.
Además, algunos de ellos, como la harina de soja, son también fuentes importantes
de proteínas. La inclusión de estas harinas en los alimentos para perros y gatos ha
sido valorada por su nivel nutricional, además de contribuir a la sostenibilidad de la
cadena de producción.
Las fibras son esenciales para la salud digestiva de los animales. Ayudan al buen
funcionamiento de los intestinos, previniendo problemas como el estreñimiento y
contribuyendo a una mejor calidad de las heces del animal. Además, las harinas
vegetales son ricas en vitaminas del grupo B, vitamina E y minerales como el hierro,
el magnesio y el zinc, nutrientes esenciales para garantizar la salud y el bienestar de
perros y gatos.

En la elaboración de los alimentos para mascotas, la inclusión de harinas vegetales
desempeña un papel crucial. Estos ingredientes ayudan a mejorar la textura y la
consistencia del alimento, facilitando el moldeado y la extrusión del alimento seco.
Además, las harinas vegetales actúan como «rellenos naturales», sustituyendo la
necesidad de aditivos artificiales, al tiempo que favorecen una nutrición equilibrada y
mantienen la salud digestiva de las mascotas.
Los perros, clasificados como animales omnívoros, suelen beneficiarse más de la
harina vegetal en su dieta que los gatos. Los gatos, clasificados como carnívoros
obligados, tienen un tracto digestivo menos adaptado a grandes cantidades de fibra.
Por esta razón, la inclusión de harinas vegetales debe ser moderada y equilibrada
para no comprometer la digestibilidad y la absorción de nutrientes esenciales.
En resumen, las harinas vegetales en la alimentación de perros y gatos ofrecen una
serie de ventajas nutricionales y medioambientales, y se utilizan a menudo en dietas
completas y equilibradas adecuadas para los animales.