En este artículo, podrás entender el paso a paso para poner en práctica todos esos conocimientos:
- Calcula la cantidad diaria de alimento que el gato debe comer, de acuerdo con la especificación del envase del alimento o con la sugerencia de un médico veterinario.
- Tras pesar la cantidad calculada, va bien establecer una medida fácil como referencia para ser usada a diario, por ejemplo: una taza marcada.
- De la cantidad total de alimento seco, quita 20% y cambie por 20% de alimento húmedo. El resultado será: 80% de alimento seco +20 % de alimento húmedo = total de alimento del día.
Ejemplo; se el gato va a comer 1 taza de alimento, ⅘ van a ser de alimento seco y ⅕ reemplazarás por alimento húmedo. - Pesa el gato y apunta los valores en un lugar accesible. A partir de esa primera medición, verifica se con la cantidad de alimento diaria establecida el animal ganará, mantendrá o perderá peso, de acuerdo con su objetivo. Eso permitirá que, a lo largo de las semanas, sea posible ajustar esa cantidad para más o para menos. Haz adaptaciones en la alimentación siempre que el gato esté perdiendo o ganando mucho peso.
- El alimento seco debe ser repartido en pequeñas cantidades por la casa de una a dos veces al día, pudiendo quedar en el ambiente como máximo por 24 horas. Ya el alimento húmedo debe ser ofrecido preferencialmente por la noche, cuando generalmente el tutor está en casa, por ser un alimento que no contiene conservantes y se degrada rápidamente.
- Al final del día siempre verifica los locales en los cuales has puesto el alimento y limpia las sobras.
Al utilizar el alimento en el enriquecimiento ambiental es importante tener un control de la cantidad que el gato está comiendo y cuanto de alimento está sobrando, y, consecuentemente, monitorear el peso de la mascota. No es un problema que el gato no esté comiendo todo el alimento distribuido por la casa desde que se haga el control del peso.
Agradecimento a la colaboración del Grupo de Estudo en Comportamento (GEC) de la Cão Cidadão.
Recuerda: si el gato tiene la costumbre de pedir comida, con ese proceso de enriquecimiento ambiental es posible que él empieza a maullar más veces y tenga que pasar por una etapa de adaptación, PERO NO DESISTES. Estos cambios van a ayudar a tu gato y ti a llevar una vida con más calidad.